Si hay una serie que marcó un antes y un después en la forma de consumir series de televisión y de crear un furor mediático mucho antes de Juego de Tronos, fue sin duda, Lost (Perdidos). Una producción llevada a cabo por el aclamado producto J. J. Abrams y que e centra en una trama de aventuras, misterio e intrigas que comienza con un accidente de avión, cuyos supervivientes llegan a una remota isla del Océano Pacífico. Su supervivencia es amenazada frecuentemente por extraños misterios que se encuentran en la isla a medida que se van repasando a fondo todas las historias de cada uno de los personajes de la serie.